lunes, 29 de junio de 2015

Mis favoritos en Instagram

¡Hola mafiosas!

Instagram se ha convertido en una popular red social, de hecho muchos tuiteros han abandonado sus cuentas por migrar a esta app de imágenes (yep, yo soy una pero prometo que pronto volveré a Twitter). En lo particular me encanta poder ver las tendencias sin tener que salir de casa y además me conecto con mis marcas favoritas para comprar las piezas que me enamoran. Es por eso que quiero compartir contigo mi Top Five en Instagram, son cuentas de diseñadores venezolanos que hacen ropa linda y super trendy (no incluyo accesorios porque de eso estamos saturados) y lo mejor es que cada uno tiene su propio estilo (no verás uniformes aquí):
  • Perinola: Helena Gil es la mente creativa tras la marca, la cual muestra un estilo bohemio con un toque sensual (porque la hippie moderna es femenina y nada descuidada). En su cuenta podrás ver fotos inspiradoras con hermosos looks, además te enterarás cuando hay sábados de descuentos (hubo uno hace poco al que me hubiese encantado ir) y algo que luce muy divertido, los "open mic". Viaja a otra época a través de @PerinolaHG

  • Atelier Mariana Camacho: Calidad y versatilidad son dos características de las creaciones de Mariana Camacho, cuyo estilo es sofisticado y elegante, perfecto para destacar con mucho glamour en cualquier situación (sea en la oficina, en una cena formal o paseando con tus amigos). Esta cuenta nos descubre una marca apasionada por los detalles, en donde cada puntada cuenta. Vive el estilo chic en @AtelierMarianaCamacho

  • Enrique D´Armas: Este talentoso diseñador está radicado en Panamá, desde donde nos muestra un poco de su magia. Sus diseños vanguardistas y bien confeccionados son pensados para mostrar a nuestra "reina desobediente" interna, así que prepárate para costuras rebeldes, formas inesperadas y un look absolutamente divino. Encuentra la osadía en @EnriqDarmas

  • Rosa Barrocca: Jeoshaine Machado le inyectó frescura al negocio familiar, con piezas cuyo estilo clásico sobrevive a pesar de la crisis (la escasez de materia prima y la creatividad de la diseñadora hizo que la marca sacara bellísimas prendas hechas con tela de tapicería). Cada publicación en Instagram habla de romance pero también de una mujer segura de sí misma, con gran sentido del estilo. Destaca del montón por las razones correctas en @RosaBarrocca

  • Kapoha: Esta es de las más recientes que he añadido a mi lista; tiene un estilo juvenil y romántico, con piezas de líneas limpias, hermosos estampados y algunas en colores sólidos. Me parece ideal para el día a día ya que aportan el toque moderno y de tendencia sin dejar de lado la comodidad, además de subir el nivel de un outfit básico. Enamórate en @kapoha_

Dales un vistazo y ya me dirás que te parecen, no olvides pasearte también por mi Instagram que es @MafiaGlam para que descubras qué otras cuentas adoro, looks de la Mafia, tendencias, Glam Tips ¡y mucho más!

¡Hasta la próxima!

lunes, 22 de junio de 2015

Cuando tu país no te quiere

¡Hola Mafiosas!

Mi blog es mi hogar, aquí me siento segura y a gusto con lo que veo pero cuando me toca enfrentar al mundo real a veces el estrellón es muy fuerte y, más que doloroso, es decepcionante.

Venezuela es un país hermoso, está llena de paisajes que quitan el aliento, en cada rincón hay una historia fascinante; particularmente en Caracas (mi ciudad) encuentras arte en cada paso que das (no hay edificio simple, no hay acera sin algo que llame tu atención) y El Ávila siempre te guía (dicen que los caraqueños no nos perdemos gracias a ella). Pero cuando pasamos a la gente, todo pierde su encanto. Nos dicen que los venezolanos somos "alegres, solidarios, trabajadores, activos, nobles" y eso es FALSO. Más de un hermano venezolano es capaz de dejarte sin nada si te descuidas (esa bendita "viveza criolla" que tanta gracia hace no es más que esa necesidad de aprovecharnos de todos y burlar las leyes siempre que se pueda). Al final el ciudadano decente (que sí existe pero no en abundancia) se siente cercado por todo lo que vivimos aquí y, lo peor de todo, no es solo culpa del gobierno.

El año pasado viví una pérdida realmente dolorosa (tanto que no puedo ver fotos de ese ser especial sin ponerme a llorar) y a partir de ese momento pareciera que todo va orientado a sacarme de mi país. Primero dos hospitales que nos dijeron "eso es normal, hay que esperar", una clínica que no quiso firmar la defunción para no meterse en problemas (sin mencionar el trato al ingresar a mi pariente VIVO, hasta que la tarjeta no pasó no hubo atención), los que querían hacerse con el negocito que esta persona tenía, el banco que nos negó la poca plata que había en la cuenta (y que no alcanzan ni para cancelar el 10% de los gastos funerarios) porque no tenemos la declaración de herederos únicos y universales (y sépanlo, el costo del abogado por hacer esto supera lo que está en dicha cuenta!). Adicional a esto tengo un compañero al que un día le pedí por favor que bajara un poco el volumen a su corneta y lo que obtuve fue una respuesta totalmente grosera (adiós caballerosidad) y el volumen más alto cada vez que me ve (si al menos fuera un buen equipo pero es que parece que mientras menos cultura musical se tiene peor es el aparato, apuesto que en un lateral debe leerse Soni o Sonny). 

Hace unos 12 días hice una encomienda en Domesa, según ellos no encontraron la dirección y devolvieron el paquete a la agencia donde la hice. Lo malo no es eso, sino enterarme porque mi cliente me avisó que a la fecha no tenía nada y fui para allá a buscar información (pero si pidieron mi número celular, por qué no me avisaron ellos?). El caso es que tengo la opción de retirar el paquete y enviarlo por otros medios SIN DEVOLUCIÓN DEL DINERO o pedir que lo reenvíen a la agencia más cercana ("pero eso casi no lo hacen"). A pesar de recordarles que en su publicidad hay un pterodáctilo sobrevolando el vehículo de la empresa mientras este recorre kilómetros para llegar a una solitaria casita en medio de la nada y rematan con la frase "con Domesa su encomienda, de que llega, llega" por ende si el mío no llegó deben hacerse responsables y resolver, escucho que la gestión se hizo así que no hay devolución del dinero. Solo aceptaron mandar un reclamo por correo cuando les dije que a mi no me consta que efectivamente el paquete haya salido de la agencia y eso me suena a estafa.

Total que me quedo pensando "es esto lo que quiero vivir? Necesito tragarme la impotencia de no poder reclamarle a nadie para evitar que me den un tiro? Tengo que aceptar la incompetencia de quien se compromete a prestar un servicio y cobra por ello? Debo tolerar que nuestra mentalidad sea la de "la culpa es del otro" para así no resolver nada?". Esto no es culpa del gobierno (o no solo de este), el mal lo arrastramos desde tiempo inmemoriales, desde la casa, desde los padres que quieren enseñar valores que no practican y los que no reprenden a tiempo; viene desde el maestro que le gusta dar clases pero no enseña a pensar; desde los amigos que se unen para humillar al que tratar de seguir un camino mejor; desde la pareja que se limita a alimentarse el ego mutuamente. Habrá alguna manera de detener esta involución? Darnos cuenta de nuestros errores como sociedad para corregir y avanzar? No lo sé y lamentablemente cada vez hay más razones para pensar que no, que nada va a cambiar. 

Para finalizar (y pido disculpas por ocupar tu tiempo en algo que no es glamoroso ni divertido) solo me queda llamar a la reflexión. Muchos venezolanos (buenos y malos) salen de esta tierra para no volver, quiero pensar que los segundos no van a diseminar la mala semilla sino que se adaptaran a sociedades más avanzadas que ésta y lograran el cambio que tanta falta hace aquí. Si eres de los que se queda o ya estas planificando tu salida, recuerda que el gentilicio no te define, date la oportunidad de ser mejor ciudadano y mejor persona, siente orgullo de tus logros honestos y sirve de ejemplo para los demás.

¡Hasta la próxima! (prometo que sí hablaré de moda y estilo)

miércoles, 10 de junio de 2015

Compras Inteligentes: estirando el presupuesto con glamour

¡Hola Mafiosas!

Suelo salir poco pero eso no me hace estar alejada de la realidad que vivimos. Verse bien y vestir las últimas tendencias parecen frases imposibles de juntar en la misma oración debido a los precios tan elevados que vemos en las tiendas (sea una boutique en Los Naranjos o un humilde local en el centro, todo es igual de incomprable). Si eres shopaholic seguramente estarás deprimida, soñando con sitios donde poder comprar tus antojos sin que eso signifique comer arepa con mantequilla hasta la próxima quincena. 



Aunque la crisis nos arrope, siempre habrá algo que podamos hacer para satisfacer nuestros gustos sin poner en riesgo las finanzas personales; ahora más que nunca hay que retomar el concepto de compras inteligentes, identificando las piezas cuyo retorno de la inversión este garantizado y evitando la adquisición de aquellas que permanecerán por años con la etiqueta puesta.



Lo primero es tener un clóset de piezas básicas, de hecho Tim Gun dice que solo 10 prendas son imprescindibles en el armario de una mujer (en el caso de las venezolanas serían 8 ó 9 ya que no todas aplican por nuestro clima). Te dejo el listado para que revises qué tienes y qué te falta:
  1. El clásico vestidito negro (LBD). Por las rodillas, con pocos o ningún adorno para hacerlo aún más versátil.
  2. Un trench. Esto sería un poco díficil de llevar según la región donde te encuentres (no quiero imaginarme a un marabino o a un oriental sudando a mares por el bendito sobretodo). Un abrigo de verano o un cardigan es la adaptación que le hago al listado (¿acaso pensaste que la Mafia seguiría todas las reglas?).
  3. Un pantalón clásico, es decir: recto, sin rayas ni estampados, de color neutro.
  4. Una camisa / blusa blanca.
  5. Una falda (lápiz, evasé, skater,  etc. Lo importante es que te sientas fabulosa en ella).
  6. Un blazer. Es la prenda que le da el toque formal y chic a un outfit básico o casual (todos recomiendan usarlo con jeans, pero créeme que hay vida más allá de eso).
  7. Un vestido para el día. Si no lo conoces entonces piensa en ese vestido que podrías llevar al trabajo y/o para un evento casual ¡de eso se trata! Evita los escotes pronunciados y que sea muy corto o ceñido.
  8. Un par de jeans. Todas tenemos uno en el armario (y algunas hasta más) pero la realidad es que no todos se ajustan a este listado ¿por qué? Porque Tim Gun indica que deben hacernos lucir fabulosas y ser versátiles, lo cual se traduce en corte recto, oscuros y sin rotos o zonas deslavadas (levanten la mano quienes quedaron raspadas).
  9. Un jersey de cachemira. Otra prenda que no aplica porque la cachemira es lana solo que más fina y suave además de costosa, muy costosa. Así que para no ahogarte por el calor ni por las deudas mi opción ganadora es una chaqueta de denim oscuro (es más acorde al clima, además del toque cool que le da a quien lo lleva).
  10. Una alternativa a la ropa deportiva (la cual debería usarse solo para practicar, pues, deportes). Antes que pienses "¡pero el sporty chic es muy popular!" debo recordarte que se basa en la mezcla de prendas de estilo deportivo (que no necesariamente sirven para sudar en el gym) con otras de corte casual o formal. En este punto, el "Gurú de Estilo" se refiere a esas personas que les encanta vestir monos o leggings, camiseta y zapatos deportivos para hacer diligencias, tomarse un café o incluso en una cita romántica. La idea es tener ropa cómoda (vestidos, bermudas, chemises, etc.) que te haga lucir bella a toda hora, no que te impulse a pensar "ojalá no me encuentre a nadie de la oficina".
Si todo esto te parece aburrido (usar una camiseta blanca con un blazer y jeans ya podría considerarse un uniforme) el diseñador Michael Kors le agrega un toque de locura "ten básicos en colores impactantes". Así que en vez de llenarte de blazers negros o marrones podrías buscarlos en otro color (y combinarlos con tus básicos neutros). Mezclando estas dos teorías conseguirás un buen guardarropa, que aún con pocas piezas combinarán perfectamente entre sí. 


Verse bien es posible con un poco de imaginación y otro poco de paciencia. Si te tomas el tiempo de ver y probar lo que te gusta pensando en estas sencillas reglas verás que en poco tiempo tendrás una colección de piezas acordes para toda ocasión.

¡Hasta la próxima!